
En el mes de enero, en el Centro Ocupacional de Funcasor Helen Keller, las educadoras realizamos una programación individual personalizada a cada una de las personas usuarias en la que detallamos los objetivos que perseguimos según las necesidades de cada una de ellas. En el caso de las personas con sordoceguera, los objetivos siempre están encaminados hacia una mejora del nivel comunicativo principalmente, puesto que consideramos que la base de partida de todo aprendizaje es la comunicación y mediante esta podemos lograr la adquisición de conocimientos.